Practicas Colaborativas /// MUIPAV 20/21
Ruta
Ten
ta cu
lar
Tentacular Route ///
etimología: Verdino + virginidad

La Verdinidad, como cura o renacer, se pone de manifiesto en una acción biofílica situada en una de las zonas verdes de la ciudad de Cuenca, tratando de reflexionar sobre la conexión umbilical que han sentido los humanos con la Madre Tierra desde el inicio de su Civilización y que hoy ha perdido…Desde la apropiación y tratamiento de la Tierra en la era Neolítica, el nacimiento de las Urbes, hasta el conocimiento de la curandera e investigadora, quemada en la hoguera, por ser experta en servirse de aquellas sustancias naturales que hacían espantar los males.
La ofrenda-acción invita a cultivar plantas aromáticas, como la hierbabuena, y se sitúa en la vega del río Júcar, justo debajo de Ermita de las Angustias, un paso de senderismo y peregrinación a este santuario, en plena naturaleza.


Alex Eiffel:

El acto titulado Ofrenda a la Verdinidad de Lucía me pareció una verdadera ofrenda a la naturaleza. El ambiente era relajado, las conversaciones artísticas y distendidas. Estábamos en un momento idóneo, tras la acción de los Davides donde habíamos descansado al lado del río, pintado juntos y consumido bebidas, comida y tabaco.
Momento cúspide de merienda, colaborativa (literalmente me pasaron trozos de comida ya que yo no llevaba) de ocio y experimentación plástica.
Al salir de la acción de los Davides, justo un poco a la derecha en el camino del bosque, Lucía interrumpió el recogimiento del campamento para plantar dos seres vivos.
Uno de los Davides le ayudaba con las manos mientras todos los demás sujetabamos cosas utilizadas anteriormente y observábamos, hablando de cuando volviéramos a pasar por allí dentro de unos años y las plantas de Lucía, como estatuas naturales, nos recordasen esa energía positiva y fluyente que sentíamos en el ambiente.
Es verdaderamente bello ver a un ser humano ayudando a una planta a nacer


Dávides:

Justo a continuación de nuestro trabajo tuvimos la suerte de participar en el trabajo de Lucía, en él, pasamos del acto principalmente de observar la naturaleza a entrar en un contacto más directo y táctil con ella. En su trabajo tuvimos que sembrar dos plantas como una ofrenda a la virgen, que es lo opuesto a lo que tradicionalmente se hace en Cuenca y sus alrededores donde se producen flores para matarlas. El sitio fue elegido intuitivamente por el grupo que estaba muy cerca del sendero por donde transitan las personas, esta casualidad hace que cuando pasamos por ahí y la vamos viendo crecer, podamos seguir reflexionando sobre el mensaje de la obra y sentir una fuerte conexión con la vida.
Ofrenda a la Verdinidad